Colombia denuncia supuestos "acuerdos" de Venezuela y Ecuador con las FARC

Colombia anunció hoy que denunciará ante la ONU y la OEA a Ecuador y Venezuela por sus supuestos "acuerdos" con las FARC, y descartó enviar tropas a las fronteras con ambos países, con los que las relaciones diplomáticas se han deteriorado tras la operación militar colombiana del sábado en territorio ecuatoriano.

La Presidencia de Colombia emitió un comunicado en el que expresa "su preocupación" por los "acuerdos que puedan existir entre el grupo terrorista de las FARC y los Gobiernos de Ecuador y Venezuela, que violan la normatividad internacional en su prohibición a los países de albergar terroristas".

Colombia expresa "el afecto y respeto a los pueblos hermanos de Ecuador y Venezuela", e insiste en que "no tiene tradición belicista" y que "su único interés es la recuperación del orden público interno".

La grave crisis diplomática fue generada por la muerte de "Raúl Reyes" , alias de Luis Edgar Devia Silva, portavoz internacional y considerado el "número dos" de las FARC, en una operación de tropas colombianas con apoyo aéreo en una zona selvática y fronteriza en territorio ecuatoriano.

Tanto el presidente venezolano, Hugo Chávez, como el ecuatoriano, Rafael Correa, anunciaron el domingo el envío de tropas a las zonas limítrofes con Colombia, país al que acusaron de violar la soberanía ecuatoriana.

Preocupación internacional

Las autoridades colombianas informaron el domingo del contenido preliminar hallado en tres ordenadores de "Raúl Reyes", en el que se mencionan reuniones de ese jefe rebelde con el ministro de Seguridad ecuatoriano, Gustavo Larrea, así como al presidente venezolano.

El lunes, unas horas antes al comunicado de la Presidencia colombiana, el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, anticipó que su Gobierno se mantendrá "prudente" y que no se enviarán tropas a las fronteras con Venezuela y Ecuador.

La actual situación de las relaciones colombianas con dos de sus más cercanos vecinos no sólo preocupa a sus gobiernos y a partidos locales sino también a toda la región, hasta el punto de que Estados Unidos, Italia y España, entre otros países, han instado a una solución dialogada.