miércoles, 22 de agosto de 2007

Una misma familia pierde a decenas de parientes en el terremoto de Pisco


El terremoto del pasado miércoles ha causado heridas irreparables en miles de personas, pero si hay un caso especialmente triste es el de la familia Espino, que ha perdido a decenas de sus miembros, desaparecidos cuando conmemoraban un mes del fallecimiento de un familiar.

Entre 70 y 80 parientes estaban en la iglesia de Pisco cuando ésta se vino abajo. Una semana después del terrible desenlace, hermanos, esposos, tíos, primos, cuñados y abuelos han sido enterrados juntos en el Cementerio de Villa en Pisco, la ciudad más afectada por el seísmo.

Uno de los parientes que sobrevivió a la tragedia, Moisés Guillén ha explicado por ejemplo que ha perdido a su madre, a su hermana y a dos de sus hijos.

Del numeroso grupo de sus familiares "fallecieron unos 50". La desgracia golpeó a tres generaciones de esta familia, ya que el mayor de sus fallecidos tenía 69 años y el menor 3.

0 comentarios:

Publicar un comentario