Un incendio en una discoteca ilegal en el sur de China, frente a la frontera con Hong Kong, dejó al menos 43 personas muertas y otras 88 heridas, en un nefasto recordatorio de las fallas del sistema regulatorio del país.
El incendio comenzó justo antes de la medianoche en el club Rey de los Bailarines, y fue provocado por una muestra de fuegos pirotécnicos en el tercer piso, dijo la agencia oficial de noticias Xinhua, citando a la policía local.
El propietario del club, ubicado en una zona obrera que se encuentra a una hora de viaje desde el centro de Shenzhen, era interrogado por la policía, pero aún no se han presentado cargos, informó Xinhua.
El salón principal se llenó rápidamente de humo tóxico después de que la exhibición tocó las lozas del techo y las luces se apagaron poco después, lo que provocó pánico entre los asistentes que intentaron huir en la oscuridad, dijeron testigos.
El incendio no era tan grande, pero había mucho humo, dijo un hombre de apellido Zhang, quien dijo que trabajaba en el club.
Todos iban hacia la salida principal porque no sabían que había una atrás (...), intentamos decirles, pero nadie escuchaba, agregó Zhang.
Medios locales y testigos dijeron que el club operaba sin las licencias necesarias y nadie les prohibía su funcionamiento, pero funcionarios locales no pudieron confirmar la información inmediatamente.
El incendio comenzó justo antes de la medianoche en el club Rey de los Bailarines, y fue provocado por una muestra de fuegos pirotécnicos en el tercer piso, dijo la agencia oficial de noticias Xinhua, citando a la policía local.
El propietario del club, ubicado en una zona obrera que se encuentra a una hora de viaje desde el centro de Shenzhen, era interrogado por la policía, pero aún no se han presentado cargos, informó Xinhua.
El salón principal se llenó rápidamente de humo tóxico después de que la exhibición tocó las lozas del techo y las luces se apagaron poco después, lo que provocó pánico entre los asistentes que intentaron huir en la oscuridad, dijeron testigos.
El incendio no era tan grande, pero había mucho humo, dijo un hombre de apellido Zhang, quien dijo que trabajaba en el club.
Todos iban hacia la salida principal porque no sabían que había una atrás (...), intentamos decirles, pero nadie escuchaba, agregó Zhang.
Medios locales y testigos dijeron que el club operaba sin las licencias necesarias y nadie les prohibía su funcionamiento, pero funcionarios locales no pudieron confirmar la información inmediatamente.
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